jueves, 19 de abril de 2012

TDA: "ESTOS CONCURSOS NOS PERMITEN CONOCER MÁS LA IDIOSINCRASIA DE CADA LUGAR"


TDA entrevistó en exclusiva a Bernarda Pagés, guionista y figura protagónica de "Ana y el vino", una de las series ganadoras de los concursos de Fomento TDA. Por: Facundo Gómez - Marcos Tricarico
La posibilidad que suelen brindar los concursos organizados por el Consejo Asesor del Sistema Argentino de TV Digital Terrestre (SATVD-T), no sólo buscan lograr la apertura laboral de actores, guionistas y productores sino que, además, y a través de sus realizaciones, la cultura, el arte y el trabajo de las distintas regiones puedan verse reflejados y disfrutarse en todo el país. Tal es caso de "Ana y el vino", la obra de Bernarda Pagés que buscó, no sólo reflejar una historia de vida, sino también las bondades de una bella provincia como lo es Mendoza. Los móviles que la llevaron a su realización y las expectativas que trajo consigo su obra son algunos de los temas que, con Bernarda, pudimos charlar dejando ella traslucir, en cada una de sus respuestas, la felicidad que le trae tal logro como la que le produce su actual embarazo y que TDA refleja en esta nota que compartimos con Ud.

En principio nos interesaría saber ¿cómo surgió el proyecto de Ana y el vino?

"Ana y el vino" es uno de los proyectos federales que ganó por la región de Cuyo el año pasado. En realidad siempre he tenido el deseo de generar proyectos en Mendoza a pesar de no haber vivido allí aunque todos mis veranos los pasé allí ya que mi papá que si era mendocino tenía una casa muy antigua que hace poco se pudo vender. Pero más allá del deseo al ver la posibilidad de estos concursos y leer sus condiciones surgió algo en mí que decía: "Esto es lo que tengo que hacer". A partir de allí me contacté con gente y comencé a escribir. 

Su obra "Ana y el vino", ¿qué deja traslucir en su temática? 

Te cuento: hace muchos años que vengo trabajando con el tema de la transformación y del proceso de transformación de la mujer. En las cosas que suelo escribir éste es un tema que abordo mucho y de allí fue surgiendo gran parte de la obra. Puedo decirte que trata de una mujer mendocina que se fue a vivir a Buenos Aires y que escapando de un dolor decide volver a su tierra natal, a la casa que le dejó su padre quien falleciera poco tiempo atrás. Este regreso constituye un volver a sí misma. Abordar el regreso de una mujer a sus raíces me pareció muy interesante para trabajarlo. Considero que los procesos de transformación no son cambios sino re-descubrimientos de quien es uno mismo y eso es lo que cuento en la obra. En síntesis "Ana y el vino" es la historia de una mujer que vuelve a su tierra natal para poder descubrir quién es y poder vivir de esa manera cotejándola en paralelo al proceso de transformación que sufre la uva hasta llegar a convertirse en vino.

¿De qué manera Ana logra desarrollar su re-descubrimiento?

"Ana" se va transformando, en quién es verdaderamente, capítulo a capítulo. Entonces, a partir de trabajar ese paralelo con la uva pude, como vector de la serie, lograr este encuentro como proceso de encuentro con uno mismo en paralelo a poder hablar de lo que es Mendoza, de lo que son los viñedos, de lo que es el valor de la tierra; es decir destacar que la transformación del ser humano, no tiene que ver con cambiar nada, sino con poder sacarse todo lo que uno se puso para esconderse, viéndose que la transformación que hace Ana aquí es simplemente, descubrir quién es ella realmente. 

La búsqueda de la trama y su elaboración ¿cuánto le costó a Ud.?

En verdad, cuando me dí cuenta de que era esto de lo que quería hablar, me fue muy fácil escribir la historia, dado que, lo único que hice, fue volver todo el tiempo a esa Ana que quedó en su infancia. Por eso ella vuelve a la casa de su infancia, se encuentra con su infancia, y a partir de allí va rompiendo todas las estructuras que escondió. Y eso es algo de lo que estoy convencida, de que nos escondemos de un montón de estructuras que construimos para defendernos y que la transformación se produce cuando nos animamos a desprendernos de ellas. Toda la historia se centra en una cooperativa que, si Ana vende su casa, se pierde; entonces hablamos del valor del trabajo más allá de la ganancia económica, del valor de poder juntarnos y luchar juntos por un proyecto en común. En fin, a grandes rasgos, fue eso. La escribí muy rápido ya que cuando iba a empezar, apareció la posibilidad de escribir algunos capítulos para "Para vestir santos" en Polka y cuando terminé de escribirlos, me quedaban sólo quince días para entregar "Ana y el vino", teniendo hasta ahí un solo un capítulo escrito. Entonces, tenía que escribir siete capítulos en 15 días, por lo que me encerré literalmente a escribir durante quince horas diarias. Afortunadamente solo tenía un hijo grande y aún no estaba embarazada puesto que de lo contrario no lo hubiese podido lograr.

¿Cómo vivió el proceso de elaboración de Ana y el vino?

Y fue intenso porque el producto habla del dolor de una pérdida y yo había perdido hacía muy poco a mi papá quién me dio mucho a nivel cultural y me dio mucho de Mendoza a lo largo de mi vida; entonces sentí, que de alguna manera, era un homenaje enorme a él y una muy buena forma de transitar el duelo. De hecho, el día que terminé de filmar, me encerré en la habitación del hotel, abrí una botella de vino, levanté la copa, y dije: "Viejo este fue mi homenaje". Y creo que, ese punto, fue bisagra para mí, porque estas pérdidas tan importantes cuestan mucho y haber podido hacer esto, me calmó, me contacté con él desde un lugar más profundo y de mucho agradecimiento. Por lo que estoy muy agradecida de haber podido hacer este proyecto, de haber vivido este proceso y muy agradecida a él porque me dio a Mendoza, me dio el valor de la tierra, el valor de la transformación. Tenía su foto en el guión conmigo durante todo el rodaje. Y en momentos difíciles del rodaje, lo miraba y era como un refugio.

¿Qué experiencia le representó ser guionista, actriz y directora al mismo tiempo? 

Y la verdad muy buena, ya que logras conocer tanto a los personajes que es como si los estuvieras viviendo todo el tiempo y eso te permite que no sea tan costoso dirigir a un actor.

¿Quiénes han integrado el elenco?
 Juan Palomino, María Marull, actores mendocinos y yo. La mayor sorpresa que me llevé con este proyecto fue con los actores de Mendoza, porque realmente, me encontré con un nivel actoral impresionante, de hecho, yo viajé antes para hacer el casting y para hacer un mini entrenamiento ya que pensé que nos iba a venir muy bien trabajar con la cámara, con los personajes y no hubo necesidad. Hice un ensayo con cada uno que fue más para conocernos y divertirnos un rato. Y después en la filmación fue impresionante el trabajo. Si ven la serie, verán que los actores están impecables, y verán que ellos están muy cómodos trabajando. Y eso es lo maravilloso que tienen estos concursos, que son federales, entonces, descentran que el tema de la cultura y lo artístico sólo pase por Buenos Aires.

¿Cómo se ha sentido trabajando con Juan Palomino como coprotagonista del proyecto?

Con Juan ya habíamos trabajado juntos en "Mujeres asesinas" y me encantó. Cuando empecé a escribir "Ana y el vino", desde la primer página en blanco, apareció Pedro y supe que ese papel lo tenía que hacer Juan; pero como económicamente no tenía mucho para ofrecerle, tardé bastante tiempo en proponérselo. Hasta que finalmente lo llamé, leyó el libro, le gustó mucho e hizo el gran esfuerzo de ir y venir. En fin, un privilegio trabajar con él. Nos divertimos mucho, tuvimos una química increíble y él fue muy contenedor, me acompañó y apoyó todo el tiempo este desafío.

¿Cuánto tiempo demandó la filmación del proyecto?

Tuvimos cuatro semanas de rodaje, con la semana santa en el medio. Yo me instalé ahí todo el tiempo y Juan (Palomino) estaba haciendo teatro acá, así que iba y venía. Fueron jornadas muy intensas porque la serie tenía muchos exteriores para poder mostrar la provincia. Fue muy lindo y muy llevadero. Nos divertíamos mucho filmando. Y fue un placer inmenso trabajar con Juan, con María y con todos los actores mendocinos. Un placer muy grande.

¿Bajo qué género se encontraría serie?

El proyecto tiene todo el tiempo un tono de comedia. Yo, generalmente, escribo comedia, pero tengo que tener muy claro el nivel de profundidad de lo que quiero contar. Entonces, trato de mostrar la profundidad del conflicto, pero hago todo lo posible para contarlo con humor. Y así hice este proyecto. Los personajes tenían mucho humor. Sobre todo Isa, el personaje que hizo María Marull y los actores que hacen de amigos de Juan, que son personajes desopilantes. Por eso te digo que traté de contar la serie con mucho humor, pero sin perder de vista, este proceso que está haciendo Ana al encontrarse con su tierra, con sus viñedos y con esta cooperativa que en un principio quiere destruir y que finalmente termina siendo el sentido de su vida.

¿Volvería a trabajar para participar en este tipo de concursos y que opinión tiene de los mismos?

Si por supuesto. De hecho, me presenté por Santiago del Estero, quedando en tercer lugar, como primer reemplazo de los otros dos proyectos ganadores. El proyecto se llama " La Salamanca ", lo hicimos con una productora de allá siendo mi idea codirigir el mismo. Estos concursos para mí fueron una experiencia increíble y siento que vale la pena hacer el esfuerzo. Ahora estoy pensando un proyecto para Córdoba. Creo que este tipo de concursos son muy buenos y necesarios. La posibilidad de que las provincias tenga un espacio de desarrollo de su arte y cultura es muy importante. El encuentro de la gente de distintas regiones es también es muy interesante. Estos concursos nos permiten conocer más la idiosincrasia de cada lugar, y que pueda verse en todo el país. En fin,  son concursos definitivamente muy positivos.

Por último ¿cuáles son sus próximos proyectos?

Estoy escribiendo para el mercado latino y un guión a pedido para España. Voy a tener mi segundo hijo, por lo que actuar no está en mis planes, por lo menos hasta fines de Julio. A menos que necesiten una embarazada a punto de parir.

También podés disfrutár de la serie "Ana y el vino" a través de la nueva plataforma de Contenidos Digitales Abiertos (CDA)

Fuente: Prensa y Comunicación Institucional TDA

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio