El debate, con eje en la libertad de expresión y la organización cooperativa

La segunda actividad desarrollada ayer, en el marco de la I Jornada de Periodismo Autogestionado, fue un debate que tuvo como puntapié inicial las preguntas del auditorio. En ese marco, los disertantes respondieron inquietudes tales como las particularidades del proceso de organización de una empresa recuperada y cómo se intercambian los roles. En ese marco, Turraca indicó que "el proceso de organización se hereda del modelo tradicional, esto es, una cadena de producción cuyos eslabones no se alteran. En lo que sí se puede echar mano es a las jerarquías y, en este sentido, debatimos sobre las relaciones de poder".

Silvia Robles, en tanto, se refirió a la juventud y al espacio en los medios, y entendió que "en el proceso histórico actual es imprescindible, porque la dictadura y el neoliberalismo han forjado subjetividades terribles". "La generación adulta de este país se forjó en el miedo, en un proceso histórico que le arrancó hasta la posibilidad de reproducir sus condiciones de producción, como el trabajo, dejando millones de personas sin él", consideró y agregó: "Los jóvenes de hoy son hijos de un proceso histórico riquísimo. A quienes empezamos a militar a mediados de los '70 nos arrancaron la conciencia, pero hoy los jóvenes han vuelto a leer, y esto es fundamental porque nos garantizan el presente y el futuro".

A su turno, Francisco Romero respondió inquietudes sobre la tolerancia a la crítica del gobierno nacional. Así, se y le preguntó al auditorio: "¿Hay libertad de expresión?, ¿la presidenta ha querellado a quienes le dice la yegua o pusieron en duda la muerte de Néstor Kirchner?, ¿en el 85% de lo que le llega a la mayoría de los argentinos, hay elogios al gobierno nacional?", tras lo cual resaltó que no hubo en la historia "un momento de mayor libertad de expresión". En cuanto al disenso, puso como uno solo de varios posibles ejemplos el hecho de que la presidenta, que es católica y tiene sus convicciones, acepta el debate por el aborto o la Ley de Matrimonio Igualitario.

En este marco, D´Elía indicó que "así como antes los militares se decían 'reserva moral de la Nación', hoy ese privilegio se lo adjudican algunos periodistas. Hablan de moral con la bragueta baja, porque muchos periodistas de Clarín ganan tres, cuatro o más veces que los diputados que muchas veces critican; y no me digan que ellos no se sirven de la plata del pueblo porque Clarín recibió el año pasado 11 millones de pesos del Estado", y finalizó diciendo que "la dictadura no terminó, sino que concluirá cuando no nos puedan manipular la información, cuando no haya un ejército de tipos diciéndote lo mismo".